Ítaca nace en los senderos más exigentes. Por eso, estar presentes en ferias y competencias como Tibet Epic y La Leyenda del Dorado ha sido clave para diseñar cada prenda, la ropa deportiva se pone a prueba en terreno.
En cada feria comercial, los ciclistas se acercan con curiosidad, tocan nuestras telas, las prueban y se sorprenden con lo que encuentran: frescura, comodidad y mucho estilo. Escuchar frases como “se siente como si no llevara nada” al probar un pantalón Ítaca es la mayor validación de nuestro propósito.
Lo más interesante ha sido ver cómo muchas de nuestras prendas, pensadas inicialmente para el rendimiento deportivo, han encontrado un espacio en el día a día de los riders.
Jerseys que se usan con jeans, pantalones que combinan con zapatillas casuales, guantes que no solo acompañan una competencia, sino una rodada tranquila de domingo. Esa es, precisamente, la meta. Que el ciclista se concentre en el sendero, no en su ropa. Que la comodidad se convierta en rendimiento y que el estilo le dé un plus de confianza en cada pedalazo.
Entendemos que el ciclismo es más que un deporte, es un estilo de vida. Y cada vez que participamos en un evento, no solo vendemos ropa, sino que conectamos con personas que comparten la misma pasión por el camino.
Ítaca no busca ser solo una marca de ropa deportiva, sino un aliado en cada aventura. En cada competencia aprendemos algo nuevo que llevamos de vuelta al diseño para seguir evolucionando.
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Ítaca: cuando la comodidad se convierte en rendimiento
La Chivatera Race: más que ropa, una experiencia de confianza